12.10.06

[uno.cero]

nuevamente a horas en las que la gente habitualmente convive con un profundo sueño, sólo quiero sentir que el orden en mi cabeza será suficiente para poder abordar mi cama ininterrumpidamente.
mi obsesiva -o debería decir caprichosa- búsqueda de accesorios se vio plenamente satisfecha esta mañana; un día laboral absolutamente ordinario, esta vez privativo de unas profundas intenciones de visitar el cine y, un breve paseo nocturno en el que se subraya mi racional intento de convencerme que el periodo de sorpresa con un desconocido que no rebasa los límites de lo imaginado -aunque sí provoca evidentes ganas de estar cerca- debe ser extendido, o bien liberado a la decisión de algún mañana, exprimiendo por un instante esa emoción que provocan unos ojos que intempestivamente se posan sobre los propios. así sin más, esta vez no habrá un intento de mi parte, sin embargo, siempre quedará "el próximo sábado" y -casi siempre- la misma gente.

1 comentario:

Celestina Tercioipelo dijo...

jotchis... me cuentas?