9.2.08

[ocho.siete]


obedeciendo al orden jerárquico y de acuerdo a la naturaleza especial de un viernes, ayer fui al cine. el amor a los hermanos coen ha vuelto a habitarme*; la narrativa de no country for old men es magistral y placentera, javier bardem es una pieza inmejorable.



pocas cosas en la vida me devuelven tanto a mí mismo como un viernes de pelo nuevo, ropas impecables, cine sorprendente y solo, aipod y crisis emotiva.



*alguna vez leí que paul thomas andreson dijo "admitámoslo, nunca he hecho ni haré una película como magnolia"... en ese entonces mi mejor amiga y yo nos ecargamos de enlistar a qué directores podría aplicárseles una frase como ésta -el resultado era casi exorbitante-. supongo que para mis ojos, y a pesar del innegable talento, seguiré diciendo lo mismo a cerca de joel y ethan después de haber visto the man who wasn't there.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

sobre las poéticas que parecen terminarse pero son infinitas, sobre aquello que nos devuelve hacia nosotros: paraísos, paraísos. mire... tengo otra glosa (de A. Akhmatova):

Llevamos el paraíso como una condena bendita;
miramos en él, como en un aljibe insondable,
más profundo que los libros admirables
que surgen de pronto y lo contienen todo.

un saludo grande grande.

f.

Juan Manuel Torreblanca dijo...

muy bonito el poema de aquí arriba (ignorando benévolos -porfavor- lo burda y chiquita que resulta la palabra 'bonito' frente a condensaciones de semejante densidad)...

el infinito...

fatalidad su fascinación y melancolía reconocer (cuantas veces sea necesario) que sencillamente no es para nosotros... que lo que se aprehende en una experiencia humana me resulta difícil creer que pueda ser más que una vana ilusión, una fata morgana puesn...

y bueno...

lo que siempre me ha fastidiado, hablando de esa suerte de libro (que encierra un todo, que abre la mente y hace entender por un segundo verdades y misterios,) es que termina... y uno debe salir de esas páginas clásicas y trascendentales y regresar al mismo laberinto cotidiano perecedero y fútil...

but then-again back to main topic...

No Country for Old Men... me parece incomparable a The Man Who Wasn't There...

no me atrevería a decir que una es mejor... no... la anterior me partió mente y corazón sorprendiendo con tristísima belleza y ahora percibo asimismo un virtuosismo incuestionable en los hermanos cineastas, un logro magistral y de reinvención de cocktail temático que en otras manos no pasaría de lo anecdótico (atorándose seguramente en el cliché) sin embargo esta reciente labor alegórica es tan sencilla y contundente y conmovedora... que no es justo juzgarla y compararla...

permisible bajo la luz del criterio impresionista o de preferencias y poéticas personales... sin duda...

mas, en una enormidad afortunada que mi juanitoescarcha espectador no pudo más que agradecer, entra -a mis ojos- en el ámbito paradójicamente ilimitado de lo humanamente inefable...

y sí, bardem es magia.

j

mamá logón dijo...

manchare con esta groseria de letras la linea de sus comentaristas.

una vez concoci un jotch, todavia me acuerdo de ese jotch, para ese jotch solo era otro comentario mas en su blog y un contacto en su mensajero...

nunca tuve sentido del humor ni supe como llamar la atención, y no me disculpare de ello.

hay un abrazo y un bezo que solian esperarte, ahora estan en el refirgerador, creo que caducaron.

y si fuera fiel a lo que quiero decir, no diria nada realmente, pero nadie lee los pensamientos, muchas veces ni siquiera las palabras mas claras.

mickemeda dijo...

Son tan apacibles esos días de individualismo, esos reencuentros en la intimidad que esta dentro, no de nuestras habitaciones, sino de nosotros, pensando y entendiendo que a veces lo más difícil para un ser humano es redescubrirse, conocerse y sobretodo superarse a sí mismo.

jotch dijo...

qué afortunada entrada.

guardo la glosa, fernando, como la más favorita de entre todas -bueno, casi-. sigamos siempre pensando paraísos.

estoy absolutamente de acuerdo con usted, juan, todo lo dicho me parece muy acertado... es cuestión de una poética muy propia.

encontrar el espejo lleno de palabras -de estas palabras- es otra de esas sensaciones incomparables.

gracias -supongo-.

leeleean dijo...

Hermosa película.
Efectivamente la mejor sigue siendo "The Man Who...", y mi favorita "Barton Fink", pero en ésta última comienza a notarse la benéfica madurez de los hermanos.

leeleean dijo...

Hermosa película.
Efectivamente la mejor sigue siendo "The Man Who...", y mi favorita "Barton Fink", pero en ésta última comienza a notarse la benéfica madurez de los hermanos.

Jonathan dijo...

P.T. Anderson. Vaya... duré años viendo y reviendo esa película (ahorita mismo podría verla nuevamente). La frase que usted le atribuye es sencillamente una lección estética.

(Aparte)
He venido leyendo y admirando, siempre discreto y silencioso, la pulcritud de este blog. Esa entrada "[del cine. dos mil siete]", es un listado que vale para quien quiera echarle un vistazo a buenos filmes, pero sobre todo por el dibujo de cada frase con signos ortográficos. Con justicia yo diría que es una forma novedosa de los caligramas de Apollinaire.

Y llndo un poco más allá, deduzco que también es producto de una poderosa cultura visual.

No hacer dibujos con palabras, sino que la idea se dibuje a través de las palabras.

Saludos.

Celestina Tercioipelo dijo...

Ahora sí tendremos una racha de harto post blóguer, niño libre y comunicado (dos adjetivos elementales).