17.4.13


abril, dos mil trece

por un instante creímos que finalmente nos habíamos convertido en adultos. luego volvieron las agujetas desatadas y los restos de galleta en el suelo.

el tiempo es un objeto cada vez menos explicable. aquí un registro de los últimos cuatro meses por estas tierras tan pobladas de prisa y de inexistencia.

uno. old skin / ólafur arnalds
dos. black flies / ben howard
tres. shut you down / caveman
cuatro. you & i / local natives
cinco. gallup, nm / the shouting matches
seis. this life / josef salvat
siete. pull me down / mikky ekko
ocho. help / hurts
nueve. blue ocean floor / justin timberlake

imagen tomada de un nuevo lugar favorito

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por un instante, creímos que era posible decir; por un instante, incluso, que éramos posibles. Y es que el tiempo, ante todo, es un país deshabitado: un cementerio de zapatos –tal vez nunca estuvimos. Nos quedan las migajas para reconstruir el paraíso –la comida podrida, el mundo acontecido: tal vez un día, con suerte, podamos olvidar el paraíso...

Puro deporte, Jorge. Me dio coraje que nadie le haya comentado esta entrada. Y ando triste :/

Su playlist, un poema, me sigue haciendo la semana...

F.